El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, ha sancionado la Ley 462 del 18 de marzo de 2025, una normativa que introduce modificaciones clave en el sistema de Seguridad Social del país. Esta reforma, compuesta por más de 200 artículos, representa una transformación significativa en la Caja de Seguro Social (CSS) y busca garantizar la sostenibilidad del sistema en el futuro.
Principales cambios y consensos
Uno de los aspectos más debatidos de la reforma fue el posible aumento en la edad de jubilación. Sin embargo, la versión final de la ley mantiene los 57 años para mujeres y 62 para hombres. A pesar de ello, la norma establece que dentro de seis años se realizará un análisis técnico para evaluar si es necesario modificar este criterio.
Para respaldar esta futura revisión, la legislación dispone la elaboración de informes anuales, con el objetivo de monitorear los cambios en el programa de pensiones y jubilaciones.
Un proceso legislativo complejo
El 6 de noviembre de 2024, el Ejecutivo presentó el proyecto ante la Asamblea Nacional, donde 81 artículos fueron modificados respecto a la propuesta original.
Finalmente, el 13 de marzo de 2025, el texto fue aprobado en tercer debate con 48 votos a favor, 23 en contra y ninguna abstención.
El presidente Mulino, al sancionar la ley, destacó el trabajo de consenso realizado y subrayó la importancia de respetar el proceso legislativo:
«He sido respetuoso de la separación de poderes», afirmó, en referencia a los cambios introducidos por la Asamblea.
Una reforma con impacto a futuro
Si bien el Ejecutivo esperaba que la ley entrara en vigor en enero de 2025, el proceso se prolongó debido a una amplia consulta ciudadana, en la que diversos sectores expusieron sus preocupaciones y sugerencias.
Con la firma de esta reforma, el Gobierno de Mulino busca fortalecer la seguridad social panameña y sentar las bases para una gestión sostenible del sistema de pensiones en los próximos años.