El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, se reunirá este viernes con Donald Trump en Washington en un momento decisivo para el futuro de Ucrania, mientras busca obtener compromisos concretos de seguridad que protejan a su país de posibles agresiones rusas futuras.
La delegación ucraniana tiene previsto firmar un acuerdo económico histórico con Estados Unidos que daría acceso a los recursos naturales ucranianos a cambio de inversiones para la reconstrucción del país devastado por la guerra. Según documentos revisados por Associated Press, el pacto establecería un fondo de inversión de gestión conjunta al que Ucrania aportaría el 50% de los ingresos futuros derivados de sus minerales, hidrocarburos y otros materiales extraíbles.
Garantías de seguridad: la prioridad de Zelenskyy
«El acuerdo puede ser parte de las futuras garantías de seguridad, pero quiero entender la visión más amplia. ¿Qué le espera a Ucrania?», declaró Zelenskyy el miércoles, dejando claro que cualquier acuerdo sobre recursos debe venir acompañado de protecciones específicas.
Sin embargo, Trump ha mostrado resistencia a ofrecer garantías concretas. «No daré garantías de seguridad… prácticamente», afirmó el mandatario estadounidense a periodistas esta semana, sugiriendo que «haremos que Europa se encargue».
Esta postura genera preocupación en Kiev, donde muchos temen que una paz negociada apresuradamente —con excesivas concesiones a las demandas rusas— solo permita a Moscú reagruparse para una futura invasión.
Una posible misión de paz europea
Ante la reticencia estadounidense, el primer ministro británico Keir Starmer y el presidente francés Emmanuel Macron han acordado enviar tropas para una posible misión de mantenimiento de paz en Ucrania si se logra una tregua. Ambos líderes visitaron Washington esta semana para discutir la propuesta con Trump.
Aunque no se espera la participación de tropas estadounidenses en dicha misión, los aliados europeos buscan asegurar al menos el respaldo de Estados Unidos mediante inteligencia aérea, vigilancia y apoyo logístico.
«Usted ha creado un momento de tremenda oportunidad para alcanzar un histórico acuerdo de paz—un acuerdo que, en mi opinión, sería celebrado en Ucrania y en todo el mundo», le dijo Starmer a Trump. «Ese es el premio. Pero tenemos que hacerlo bien».
Un complejo escenario diplomático
La reunión de Zelenskyy con Trump —la primera desde que el republicano asumió la presidencia en enero— se considera en Kiev como una victoria diplomática. El presidente ucraniano valoró positivamente poder reunirse con Trump antes que con Putin, calificándolo como «una buena señal».
Sin embargo, las recientes acciones de la administración Trump han generado inquietud en Ucrania, especialmente la llamada telefónica directa entre Trump y Putin, y las reuniones de funcionarios estadounidenses con sus homólogos rusos en Arabia Saudí sin la presencia de representantes ucranianos o europeos.
Trump también ha declarado que Ucrania «podría olvidarse» de su incorporación a la OTAN, complicando aún más las aspiraciones de Kiev de integrarse en la alianza militar occidental como mecanismo de protección frente a Rusia.
Mientras Zelenskyy busca aclarar estos temas durante su estancia en Washington, funcionarios estadounidenses sugieren que el acuerdo económico proporcionaría cierta seguridad a través de la presencia de inversiones estadounidenses en territorio ucraniano. «Es una seguridad automática porque nadie se meterá con nuestra gente cuando estemos allí», afirmó Trump el miércoles.