LeBron James demostró una vez más por qué sigue siendo una de las figuras dominantes de la NBA al liderar a los Lakers de Los Ángeles hacia su cuarta victoria consecutiva, superando 111-102 a los Minnesota Timberwolves este jueves.
El veterano astro firmó una actuación sobresaliente con 33 puntos y 17 rebotes, consolidando el buen momento de su equipo, que ha mejorado notablemente su rendimiento con un balance de 14-3 desde el 21 de enero.
Austin Reeves aportó 23 puntos y Luka Doncic completó el tridente ofensivo de los angelinos con un doble-doble de 21 puntos y 13 rebotes, confirmando la química creciente entre las estrellas del equipo dirigido por JJ Redick.
Expulsión polémica de Edwards
Los Timberwolves, que han perdido tres de sus últimos cuatro partidos y cinco de siete, estuvieron liderados por Terrence Shannon Jr., quien alcanzó su mejor marca personal con 25 puntos.
Sin embargo, el equipo de Minnesota sufrió un duro golpe cuando su máxima figura, Anthony Edwards, fue expulsado a falta de 5:27 minutos para el final del tercer cuarto tras recibir su segunda falta técnica.
Edwards, visiblemente frustrado, lanzó el balón a las gradas después de que se decretara su expulsión. Si ambas faltas técnicas son confirmadas por la liga, el escolta será suspendido por un partido, ya que acumularía 16 en la presente temporada.
El base estelar, que promedia 27,4 puntos por partido y ocupa el cuarto lugar entre los máximos anotadores de la liga, había sumado 18 puntos antes de su salida.
Triple clave de Doncic
A pesar de la desventaja, los Timberwolves intentaron reaccionar en el último cuarto. Con una racha de 13-1, lograron acercarse después de estar abajo 92-77 con menos de tres minutos por disputar en el período final.
No obstante, Luka Doncic apagó las esperanzas de remontada de Minnesota al encestar un triple espectacular, casi perdiendo el equilibrio y con el reloj de posesión a punto de expirar, para ampliar la ventaja de los Lakers a 98-91 cuando restaban 3:37 minutos para el final.
Este triunfo confirma el buen momento de los Lakers, que continúan escalando posiciones en la Conferencia Oeste con una combinación cada vez más efectiva de sus tres principales estrellas.