IMPACTO PANAMÁ
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El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) ha rechazado las apelaciones presentadas por cinco jugadores de la selección uruguaya de fútbol y la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) tras los incidentes ocurridos al finalizar el partido de semifinales de la Copa América contra Colombia en julio de 2024. La decisión del TAS confirma las sanciones impuestas inicialmente por la CONMEBOL, el organismo rector del fútbol sudamericano, a los jugadores Darwin Núñez, Ronald Araújo, José María Giménez, Rodrigo Bentancur y Mathías Olivera por su participación en una confrontación con aficionados en el Bank of America Stadium en Charlotte, Carolina del Norte.
Los hechos se desencadenaron tras la derrota 1-0 de Uruguay ante Colombia. Según las alegaciones de los jugadores y la AUF, su actuación se justificaba en defensa propia y para proteger a sus familias. Sin embargo, el TAS desestimó estos argumentos, señalando que la conducta de los jugadores constituyó una acción voluntaria, violenta e injustificada.
“El panel determinó que en este caso, el principio de defensa propia no se aplica y que la conducta de los jugadores constituyó una acción voluntaria, violenta e injustificada”, declaró el TAS en un comunicado oficial. Esta decisión implica que las sanciones impuestas por la CONMEBOL se mantendrán vigentes.
Las sanciones varían entre tres y cinco partidos de suspensión para los jugadores implicados. Darwin Núñez, delantero del Liverpool, deberá cumplir su sanción en los próximos partidos de eliminatorias mundialistas de Uruguay contra Paraguay el 5 de junio y contra Venezuela cinco días después. Esta ausencia representa un golpe significativo para la selección uruguaya, dirigida por Marcelo Bielsa, en su camino hacia la clasificación para la Copa del Mundo de 2026, que se celebrará en Estados Unidos, Canadá y México.
Actualmente, Uruguay se encuentra en la tercera posición de la tabla de clasificación sudamericana, con un margen de seis puntos sobre Venezuela, que ocupa el séptimo lugar. Los seis primeros equipos de la tabla se clasificarán directamente para el Mundial, mientras que el séptimo disputará un playoff intercontinental en marzo del próximo año.
La confirmación de las sanciones por parte del TAS genera controversia y plantea interrogantes sobre el comportamiento de los jugadores profesionales y la responsabilidad de mantener la calma y el respeto hacia los aficionados, incluso en situaciones de alta tensión emocional. El incidente ha puesto de manifiesto la necesidad de fortalecer los mecanismos de control y prevención de la violencia en los estadios, así como de promover valores de deportividad y fair play entre los jugadores y el público.
