Un innovador programa informático está desentrañando los misterios de la plataforma de videos más grande del mundo, revelando estadísticas sorprendentes que Google se ha negado a hacer públicas durante años.
Los números ocultos de un gigante digital
YouTube, que celebra sus 20 años este 14 de febrero de 2025, se ha convertido en uno de los sistemas de comunicación más influyentes de la historia, alcanzando aproximadamente a 2.500 millones de usuarios mensuales —casi un tercio de la población mundial. Sin embargo, sus estadísticas más básicas han permanecido en la sombra hasta ahora.
Un equipo de investigadores liderado por Ethan Zuckerman, director de la Iniciativa para la Infraestructura Digital Pública de la Universidad de Amherst, ha desarrollado una herramienta revolucionaria que permite, por primera vez, obtener una muestra verdaderamente aleatoria de videos de YouTube.
La realidad detrás de los números
Los hallazgos del equipo desafían la imagen popular de YouTube como plataforma dominada por creadores profesionales:
- Se estima que, para mediados de 2024, YouTube albergaba 14.800 millones de videos, un aumento del 60% desde 2022
- La duración media de un video es de apenas 64 segundos
- Solo el 0,21% de los videos analizados incluían algún tipo de monetización
- El video promedio tiene únicamente 41 visualizaciones
- El 74% de los videos no tiene comentarios
- El 89% no ha recibido ningún «me gusta»
- Más del 40% de los videos solo contienen música sin diálogo
Una plataforma más allá del entretenimiento
Ryan McGrady, investigador principal del proyecto, sostiene que YouTube debe ser considerado como una infraestructura crítica más que como un simple servicio de entretenimiento. «La mayoría se imagina que YouTube es un lugar donde los millonarios regalan premios al estilo del Juego del Calamar, pero debemos observar las maneras en que se usa, no solo las formas en que se consume», explica.
Metodología innovadora
El equipo desarrolló un «raspador» que genera combinaciones aleatorias de 11 caracteres —el formato estándar de las URL de YouTube— y verifica si corresponden a videos existentes. Para encontrar poco más de 10.000 videos, el programa tuvo que probar más de 18 billones de URL potenciales.
Implicaciones para el futuro
Paul Barrett, vicedirector del Centro Stern de Empresa y Derechos Humanos de la Universidad de Nueva York, señala que esta falta de transparencia es una anomalía en comparación con otras industrias. «Las redes sociales son protagonistas fundamentales no solo en comunicación masiva, sino en todos los asuntos de la vida política y cívica», advierte.
Mientras YouTube entra en su tercera década, estos hallazgos plantean preguntas cruciales sobre la regulación y transparencia de las plataformas digitales que se han convertido en pilares de nuestra infraestructura social.