El gobierno chino ha ordenado a bancos y entidades financieras fomentar el financiamiento al consumidor y el uso de tarjetas de crédito en un esfuerzo por dinamizar la economía. La medida busca contrarrestar la reticencia de los ciudadanos a gastar debido a la incertidumbre laboral y económica.
La Comisión Nacional de Regulación Financiera instó a las instituciones a facilitar créditos y ayudar a prestatarios con dificultades. Tras el anuncio, los mercados bursátiles chinos experimentaron un repunte significativo.
Esfuerzos para estabilizar la economía
Las autoridades planean ofrecer una conferencia de prensa para detallar estrategias destinadas a fortalecer el gasto y la inversión, factores cruciales tras los reveses de la pandemia. Aunque la economía china ha crecido alrededor del 5% según cifras oficiales, la confianza del consumidor sigue afectada por la crisis inmobiliaria y preocupaciones sobre el empleo.
Medidas complementarias
Además del impulso al crédito, el gobierno ha destinado miles de millones de dólares a programas para renovar automóviles y electrodomésticos, promoviendo así el consumo y la eficiencia energética.
El panorama económico se complica con las tensiones comerciales con EE.UU., que podrían afectar las exportaciones chinas y, en consecuencia, el crecimiento de su economía.