En un duro mensaje a los líderes mundiales reunidos en la Asamblea General de la ONU, el Secretario General, António Guterres, alertó sobre una era marcada por el «sufrimiento humano implacable». En su discurso anual, Guterres instó a los líderes a elegir entre la ley y la anarquía, la cooperación y el conflicto, en un momento en que los pilares de la paz y el progreso parecen desmoronarse.
Guterres señaló que el mundo se está volviendo cada vez más multipolar, con el surgimiento de potencias económicas como China e India. Aunque reconoció que esta multipolaridad podría traer diversidad y dinamismo, advirtió sobre el riesgo de caos si no existe una cooperación internacional efectiva y instituciones globales sólidas.
El discurso de Guterres contrastó fuertemente con el del Presidente de los Estados Unidos, quien afirmó que su nación se encuentra en una «era dorada». El mandatario estadounidense criticó a la ONU por su ineficacia en la resolución de conflictos, aunque luego suavizó su tono en una reunión con Guterres, afirmando su apoyo a la organización.
Uno de los temas centrales del discurso de Guterres fue el conflicto israelí-palestino. En sus términos más enérgicos hasta la fecha, condenó las acciones en Gaza, describiendo la escala de muerte y destrucción como la peor que ha presenciado en sus nueve años como Secretario General. «Nada puede justificar el castigo colectivo del pueblo palestino», declaró. Guterres instó a la implementación completa e inmediata de las medidas provisionales ordenadas por la Corte Internacional de Justicia, incluyendo la protección de los civiles palestinos.
La ONU también enfrenta desafíos financieros, con recortes de fondos que, según Guterres, están «causando estragos» y representan «una sentencia de muerte para muchos».
Con un creciente apoyo global a un Estado de Palestina, se espera que la guerra en Gaza ocupe un lugar central en la agenda de la Asamblea General. El Presidente de Turquía lamentó la ausencia del Presidente palestino, a quien se le negó una visa para asistir. El Presidente de Indonesia también expresó su firme apoyo a los palestinos, advirtiendo sobre el genocidio y el desprecio por el derecho internacional.
La semana de reuniones de la Asamblea General comenzó con eventos centrados en el conflicto israelí-palestino, con el objetivo de impulsar una solución de dos Estados. Líderes de todo el mundo expresaron su preocupación por la menguante autoridad de la ONU y la creciente complejidad de los problemas geopolíticos. A pesar del tema del debate general, «Mejor juntos», muchos observadores anticipan un análisis de las divisiones que enfrenta el mundo.
El Secretario General de la ONU concluyó su intervención haciendo un llamado a la acción. «Debemos elegir la paz sobre la guerra, la ley sobre la anarquía, y la cooperación sobre el conflicto. El futuro de la humanidad depende de ello.»