IMPACTO PANAMÁ
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La líder de la ultraderecha francesa, Marine Le Pen, fue declarada culpable este lunes de malversación de fondos públicos europeos y condenada a cuatro años de prisión, dos de ellos firmes, y cinco años de inhabilitación para ejercer cargos públicos.
El tribunal correccional de París impuso esta condena «de ejecución inmediata» que podría truncar las aspiraciones presidenciales de Le Pen para las elecciones de 2027, en las que los sondeos la situaban como favorita.
«El objetivo es garantizar que los representantes electos, como todos los justiciables, no se beneficien de un trato preferente», afirmó la presidenta del tribunal, Bénédicte de Perthuis, al anunciar la sentencia.
Una condena que cambia el panorama político francés
La pena de inhabilitación se aplicará incluso en caso de que Le Pen presente un recurso, lo que en la práctica le impediría presentarse a los próximos comicios presidenciales. Los dos años de prisión firme podrían cumplirse bajo arresto domiciliario con brazalete electrónico.
Tras conocer la sentencia, la política de 56 años abandonó el tribunal sin realizar declaraciones a los numerosos medios presentes, después de conversar brevemente con su abogado.
Esta condena representa un golpe decisivo para la principal figura de Agrupación Nacional (RN), quien siempre ha defendido su inocencia. La sentencia llega en un momento crítico para la política francesa, ya que el actual presidente Emmanuel Macron tampoco podrá presentarse a las elecciones de 2027.
Un «sistema de malversación» que duró más de una década
Según la investigación judicial, Le Pen y su partido pusieron en marcha «de forma concertada y deliberada» un esquema para malversar los fondos que el Parlamento Europeo destinaba a cada eurodiputado para contratar asistentes parlamentarios, aproximadamente 21.000 euros mensuales.
El tribunal consideró probado que estos empleados, en realidad, trabajaban para el entonces Frente Nacional (FN, ahora RN), permitiendo al partido ahorrar importantes sumas de dinero entre 2004 y 2016. Esta práctica está expresamente prohibida por la legislación europea.
Además de Le Pen, otros ocho acusados también fueron declarados culpables en este caso que ha sacudido el panorama político francés y podría reconfigurar las expectativas para las próximas elecciones presidenciales.
La Fiscalía había solicitado inicialmente una pena de cinco años de prisión, dos de obligado cumplimiento, y una multa de 300.000 euros (aproximadamente 325.000 dólares). Le Pen todavía puede recurrir la sentencia ante instancias superiores.
