En un intento por mejorar la movilidad urbana y promover el cumplimiento de las normas de tráfico, el alcalde de Panamá, Mayer Mizrachi, ha puesto en marcha la iniciativa «Chancletazo», una acción simbólica destinada a concienciar a los conductores que se estacionan de forma incorrecta.
El «Chancletazo» consiste en la colocación de una pegatina en los vehículos estacionados incorrectamente por los inspectores municipales, actuando como una forma de «multa social». Esta acción tiene fines puramente educativos y no conlleva ninguna sanción económica. En cambio, sirve como llamada de atención a quienes bloquean pasos de peatones, accesos para discapacitados y otras áreas de circulación esenciales.
El alcalde Mizrachi ha enfatizado que esta medida tiene como objetivo hacer visibles y corregir las malas prácticas que afectan a la movilidad y la seguridad de los ciudadanos. En sus palabras, «El ‘Chancletazo’ es una llamada de atención para promover el respeto vial y la convivencia en la ciudad». A diferencia de las multas tradicionales, esta pegatina pretende crear un impacto social a través de la vergüenza pública y la reflexión, animando a los conductores a ser más responsables con el uso de los espacios públicos.
Para amplificar el mensaje, la iniciativa estará respaldada por una campaña digital que utilizará el hashtag #Chancletazo. Los ciudadanos pueden utilizar este hashtag para compartir imágenes y denunciar pacíficamente las infracciones de tráfico que afectan a la movilidad en la ciudad. Este enfoque colaborativo aprovecha el poder de las redes sociales para educar y sensibilizar al público, fomentando una cultura de respeto en las calles.