La recién electa representante de San Francisco, Serena Vamvas, ha destapado una situación alarmante en uno de los corregimientos más prósperos de la ciudad de Panamá. Tras asumir el cargo, Vamvas se encontró con un panorama de deterioro y mala gestión que, según indica, se ha acumulado durante las últimas dos décadas.
Las instalaciones de la Junta Comunal en Carrasquilla presentan graves problemas estructurales, incluyendo techos en riesgo de colapso y goteras generalizadas. Un caso particularmente preocupante es el de una oficina cerrada hace siete años por supuesta contaminación, sin que exista documentación oficial que respalde esta medida.
Frente a esta crisis, la nueva administración ha tenido que trasladar temporalmente sus operaciones a las oficinas de Calle 50. Vamvas ha solicitado la comprensión y apoyo de la comunidad, advirtiendo que la recuperación y reorganización del corregimiento podría tomar varios meses.
Esta revelación pone de manifiesto la urgente necesidad de una gestión más eficiente y transparente de los recursos públicos en San Francisco, un área que, a pesar de su significativa contribución a la economía nacional, ha sufrido años de aparente negligencia administrativa.