IMPACTO PANAMÁ
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A 85 años del estreno de El Mago de Oz, la fascinante historia de los emblemáticos zapatos de rubí continúa cautivando al mundo. Estos icónicos zapatos, creados para la película de 1939, se han convertido en un símbolo perdurable de la cultura cinematográfica, y su historia está llena de curiosidades, misterio y un valor que rompe récords.
Originalmente, en la novela de L. Frank Baum, los zapatos de Dorothy eran plateados. Sin embargo, para aprovechar al máximo el impacto visual del Technicolor, Gilbert Adrian, el diseñador de vestuario de Metro-Goldwyn-Mayer, tomó la audaz decisión de transformarlos en un brillante color rojo. Se confeccionaron entre seis y diez pares para Judy Garland, la joven actriz que interpretó a Dorothy. De todos ellos, solo cuatro pares se conservan como auténticos tesoros.
El par más famoso, fabricado por Innes Shoe Co., es una obra de arte en sí mismo. Cubierto de lentejuelas rojas cosidas a mano sobre seda y georgette, con lazos adornados con piedras brillantes y cristales que simulaban rubíes reales, estos zapatos fueron diseñados para deslumbrar. Incluso la suela fue pintada de rojo, y la punta reforzada para resistir las exigentes escenas de baile.
Pero la historia de estos zapatos no está exenta de drama. En agosto de 2005, mientras se exhibían en el Judy Garland Museum de Grand Rapids, Minnesota, el par perteneciente al coleccionista Michael Shaw fue robado. El robo fue audaz: el ladrón entró por una ventana, rompió la vitrina y desapareció sin dejar rastro. A pesar de una recompensa de un millón de dólares ofrecida por un donante anónimo, el caso permaneció sin resolver durante más de una década.
En 2017, el FBI finalmente obtuvo una pista que condujo al hallazgo de los zapatos en Minneapolis, como parte de una investigación de fraude. En 2018, se confirmó su recuperación. El ladrón, Terry Jon Martin, confesó en 2023 que los robó creyendo que estaban hechos con piedras preciosas reales. Fue sentenciado a tiempo cumplido, un año de libertad supervisada y una multa de 23.000 dólares.
En noviembre de 2024, la casa de subastas Heritage Auctions de Dallas puso a la venta los zapatos recuperados. La subasta en vivo del 7 de diciembre fue un evento histórico: los zapatos alcanzaron la asombrosa cifra de 28 millones de dólares, superando todas las expectativas. Con las comisiones, el comprador anónimo desembolsó un total de 32,5 millones de dólares, estableciendo un nuevo récord para el objeto de recuerdo de Hollywood más caro jamás vendido, superando incluso el vestido blanco de Marilyn Monroe.
Actualmente, además del par subastado, los otros tres pares de zapatos de rubí se conservan en el Instituto Smithsonian en Washington. Su valor trasciende lo monetario; representan la magia del cine, la nostalgia y el poder de los símbolos en la cultura popular.
Los zapatos de rubí de El Mago de Oz no son solo un objeto de colección, sino un pedazo de historia cinematográfica que sigue fascinando a generaciones. Su brillo perdura, recordándonos la magia de Hollywood y la eterna búsqueda del camino a casa.
