Panamá asume un rol protagónico en la seguridad regional al obtener la vicepresidencia de Ministros de Seguridad Pública de las Américas (MISPA). El ministro de Seguridad Pública panameño, Frank Alexis Abrego, fue designado para este cargo durante la VIII reunión regional celebrada en Santiago de los Caballeros, República Dominicana. Este evento crucial congregó a representantes de 25 países, de los 34 inicialmente convocados, para forjar políticas conjuntas y sostenibles que impulsen la modernización, transformación y profesionalización de las fuerzas de seguridad en el continente americano.
La designación de Panamá como vicepresidencia de MISPA le permitirá participar activamente en la identificación de soluciones estratégicas y oportunidades de cooperación, fortaleciendo así la toma de decisiones en materia de seguridad pública a nivel regional. La lucha contra las amenazas transfronterizas se erige como una prioridad clave, con un consenso generalizado entre los participantes sobre la necesidad de aunar esfuerzos para combatir el delito, que, como se destacó, «no tiene fronteras».
En este contexto, la consolidación de esfuerzos para combatir el ciberdelito emerge como una necesidad imperante. El aumento de las amenazas cibernéticas exige respuestas coordinadas a nivel continental, y los ministros buscan satisfacer las demandas ciudadanas de mayor seguridad en sus respectivos países.
Un pilar fundamental de esta iniciativa es la interoperabilidad policial, cimentada en la educación continua como un elemento esencial para la transformación policial. Se busca establecer estándares comunes y mejorar la capacitación de las fuerzas de seguridad regionales a través de programas de intercambio de conocimientos, mejores prácticas y tecnologías. Esto permitirá una respuesta más efectiva ante las amenazas compartidas que enfrenta el continente americano.
La vicepresidencia de MISPA representa un reconocimiento al compromiso de Panamá con la seguridad pública y consolida su posición como un actor relevante en la cooperación regional. Esta designación otorga al país centroamericano la capacidad de influir en las políticas continentales de seguridad. El ministro Abrego liderará iniciativas para modernizar las estructuras de seguridad y promover la profesionalización de las fuerzas policiales en las Américas, enfocándose en estrategias que respondan a las necesidades específicas de cada país miembro.
La VIII reunión de ministros ha establecido una ambiciosa agenda para la transformación de las fuerzas de seguridad americanas. Los objetivos incluyen la implementación de políticas sostenibles, el fortalecimiento de la cooperación internacional y la modernización de las capacidades operativas. Los países participantes buscan crear un marco de trabajo conjunto que permita enfrentar de manera más efectiva las amenazas transnacionales, desde el narcotráfico hasta el terrorismo y los delitos cibernéticos que afectan la seguridad regional. Panamá, gracias a su experiencia y ubicación estratégica, se posiciona como un actor clave en la definición de políticas de seguridad continental, contribuyendo así a la estabilidad regional.