IMPACTO PANAMÁ
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Diez productoras indígenas de la comarca Emberá-Wounaan en Panamá han fortalecido sus habilidades en agricultura sostenible y desarrollo de emprendimientos rurales gracias a un taller especializado. Las participantes, provenientes de las comunidades de Alto Playán, Arimae, Lara y Emberá Puru, se dedican principalmente al cultivo de productos como piña, yuca y jengibre, y ahora buscan llevar su producción a un nivel superior.
El taller, enfocado en mejorar la productividad y explorar oportunidades de comercialización más allá de la subsistencia, se desarrolló a lo largo de tres días intensivos. Las mujeres indígenas trabajaron en estrecha colaboración con instructores expertos, adquiriendo conocimientos prácticos en técnicas productivas innovadoras, gestión básica de negocios y el uso de herramientas clave para vincular sus actividades agrícolas con las artesanías tradicionales de la comarca.
El objetivo principal de esta iniciativa es proporcionar a estas productoras las herramientas necesarias para aplicar inmediatamente lo aprendido en sus comunidades, al mismo tiempo que se fomentan nuevas vías para la generación de ingresos. Esta capacitación representa un paso crucial para empoderar a las mujeres indígenas y promover el desarrollo económico sostenible en la región.
Durante el taller, se hizo especial énfasis en la agricultura sostenible, un enfoque que busca minimizar el impacto ambiental y promover prácticas agrícolas responsables. Las participantes aprendieron sobre técnicas de cultivo que respetan el medio ambiente, como la rotación de cultivos, el uso de abonos orgánicos y el manejo integrado de plagas.
Además de las habilidades técnicas, el taller también abordó aspectos fundamentales de la gestión empresarial. Las mujeres aprendieron a llevar registros contables básicos, a calcular costos de producción y a elaborar planes de negocios sencillos. Estas habilidades les permitirán tomar decisiones informadas y gestionar sus emprendimientos de manera más eficiente.
Un componente importante del taller fue la exploración de oportunidades para vincular la producción agrícola con las artesanías tradicionales de la comarca. Esta estrategia busca diversificar las fuentes de ingresos de las mujeres y agregar valor a sus productos. Por ejemplo, se exploraron posibilidades de utilizar la yuca para la elaboración de productos artesanales o de transformar el jengibre en productos gourmet.
El taller culminó con la entrega de certificados de participación y un valioso intercambio de experiencias entre las participantes. Representantes del MICI (Ministerio de Comercio e Industrias), INADEH (Instituto Nacional de Formación Profesional y Capacitación para el Desarrollo Humano) y la Embajada de Canadá, entidades clave en el desarrollo de esta iniciativa, resaltaron que el taller forma parte de un programa piloto más amplio. Este programa se centra en la agricultura sostenible y el emprendimiento con perspectiva de género, buscando fortalecer a las productoras indígenas y sus proyectos locales.
Esta capacitación es un ejemplo concreto del compromiso de diversas instituciones con el desarrollo sostenible y el empoderamiento de las mujeres indígenas en Panamá. Se espera que esta iniciativa tenga un impacto positivo en la calidad de vida de las participantes y contribuya al desarrollo económico de sus comunidades.
