Estados Unidos ha dado un paso decisivo en su estrategia de presión contra Rusia, anunciando un paquete de sanciones que promete ser el más severo hasta la fecha contra la industria petrolera del país euroasiático. Según un documento filtrado del Departamento del Tesoro estadounidense, estas medidas afectarán a un amplio espectro del sector energético ruso.
Alcance de las sanciones
Las nuevas sanciones incluyen:
- Designación de 180 buques petroleros rusos
- Sanciones contra decenas de operadores
- Medidas contra dos grandes compañías petroleras: Gazprom Neft y Surgutneftegaz
- Inclusión de altos ejecutivos petroleros rusos en la lista de sancionados
- Sanciones a proveedores de seguros de buques como Ingosstrakh y Sogaz
Impacto en el mercado
El anuncio ha tenido un efecto inmediato en los mercados energéticos globales. El precio del barril de petróleo Brent ha superado los 80 dólares por primera vez desde octubre, reflejando la preocupación por posibles interrupciones en el suministro global de crudo.
Objetivos de las medidas
El gobierno estadounidense busca con estas sanciones:
- Golpear «la mayor fuente de ingresos» de Rusia
- Aumentar el riesgo asociado con el transporte de petróleo ruso
- Dificultar la capacidad de Rusia para evadir el tope de precios impuesto por el G7
Estas medidas representan una escalada significativa en la presión económica contra Rusia, con potenciales repercusiones en el mercado energético global y las relaciones internacionales.