IMPACTO PANAMÁ
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Los líderes de la Unión Europea, Reino Unido, Canadá y Japón han expresado reservas sobre el plan de paz propuesto por Estados Unidos para poner fin al conflicto en Ucrania. En una declaración conjunta emitida durante la Cumbre del G20 en Johannesburgo este sábado, los mandatarios reconocieron los esfuerzos de Estados Unidos, pero señalaron que el borrador actual «requiere trabajo adicional» para garantizar una paz justa y duradera.
Si bien acogieron con beneplácito los elementos importantes contenidos en el plan de 28 puntos, los líderes enfatizaron la necesidad de una mayor colaboración para asegurar la sostenibilidad de cualquier acuerdo de paz futuro. Expresaron su firme postura sobre el principio de que las fronteras no deben modificarse por la fuerza, una clara alusión a la anexión ilegal de territorios ucranianos por parte de Rusia.
Una de las principales preocupaciones planteadas se refiere a las limitaciones propuestas a las fuerzas armadas de Ucrania. Los aliados temen que estas restricciones dejen al país vulnerable a futuras agresiones. Este punto se ha convertido en un obstáculo clave en las negociaciones y exige una revisión cuidadosa para asegurar que Ucrania pueda defender su soberanía e integridad territorial.
En respuesta a las inquietudes planteadas, el Secretario del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania, Rustem Umérov, anunció que se celebrarán consultas en Suiza con altos funcionarios estadounidenses en los próximos días. El objetivo principal de estas conversaciones será presentar la visión ucraniana del plan de paz y determinar los próximos pasos a seguir. Umérov, quien también es el jefe negociador de Ucrania para un acuerdo de paz, enfatizó que Ucrania aborda este proceso con una clara comprensión de sus intereses nacionales.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, también ha tomado medidas para avanzar en el proceso de negociación. Designó un equipo negociador de alto nivel, encabezado por su jefe de gabinete, Andrí Yermak, y el propio Umérov. Este equipo, que incluye a los jefes de la Inteligencia Militar (GRU) y del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, trabajará en estrecha colaboración con Estados Unidos, Rusia y otros socios internacionales para elaborar un plan de paz «justo y sostenible».
La reacción de los aliados de Ucrania subraya la complejidad de encontrar una solución pacífica al conflicto. Si bien el plan propuesto por Estados Unidos se considera un punto de partida valioso, existen importantes diferencias que deben abordarse antes de que pueda alcanzarse un acuerdo viable. Las próximas consultas en Suiza serán cruciales para aclarar estas diferencias y avanzar hacia una resolución que respete la soberanía de Ucrania y garantice la seguridad regional a largo plazo. El escepticismo inicial sobre las limitaciones impuestas a las fuerzas armadas ucranianas sugiere que se avecinan negociaciones complejas. La comunidad internacional observa de cerca estos acontecimientos, esperando que un compromiso constructivo pueda allanar el camino hacia una paz duradera.
