El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, reafirmó este domingo su intención de acabar con la ciudadanía por nacimiento, un derecho protegido por la Constitución estadounidense. Durante su primera entrevista televisiva oficial tras ganar las elecciones, Trump calificó este derecho de «ridículo» y señaló que buscará eliminarlo mediante acción ejecutiva.
“Si podemos, lo haremos por acción ejecutiva. Quizá tengamos que volver al pueblo, pero debemos acabar con ello”, afirmó en el programa Meet the Press with Kristen Welker, de NBC.
Esta postura ha generado polémica, ya que la ciudadanía por nacimiento, garantizada por la Enmienda 14, es un principio fundamental del sistema legal estadounidense. Críticos aseguran que la medida podría enfrentar desafíos legales significativos y polarizar aún más el debate sobre la inmigración en el país.
Deportaciones masivas y medidas económicas
Trump también reiteró su promesa de campaña de proceder con deportaciones masivas de inmigrantes indocumentados, indicando que es necesario establecer un control estricto de las leyes migratorias.
Estas declaraciones marcan el tono de una administración que promete cambios radicales en políticas migratorias y económicas, mientras el mundo observa cómo se configurará su gobierno tras asumir el cargo el próximo 20 de enero.