Panamá reafirmó su posición como líder en el sector energético a nivel mundial durante la reciente Semana Mundial de la Energía, celebrada del 6 al 9 de octubre de 2025. El evento, que congregó a líderes globales, empresarios, expertos y representantes del sector energético de más de 100 países, sirvió como plataforma para que Panamá demostrara su compromiso con el desarrollo sostenible y la cooperación internacional en materia de energía.
El ministro de la Presidencia, Juan Carlos Orillac, destacó el papel crucial de Panamá como un país confiable y abierto a la cooperación, enfocado en el desarrollo sostenible del sector energético. Durante su participación en el World Energy Council (WEC), Orillac resaltó las políticas energéticas estratégicas impulsadas por el gobierno del presidente José Raúl Mulino, que consolidan a Panamá como un hub regional en el ámbito energético.
Orillac enfatizó tres pilares fundamentales de la estrategia energética panameña: la interconexión eléctrica con Colombia, el Programa Nacional de Biocombustibles y un cronograma definido de licitaciones de energía y potencia para los próximos cuatro años.
La interconexión con Colombia fortalecerá la integración energética regional, mientras que el Programa Nacional de Biocombustibles busca promover el sector agrícola y reducir las emisiones de carbono. El cronograma de licitaciones, por su parte, aporta transparencia y previsibilidad a los inversionistas, generando un clima de confianza y atrayendo nuevas inversiones al país.
«Por primera vez, Panamá cuenta con un plan de licitaciones claro, que brinda seguridad jurídica y atrae nuevas inversiones. Estamos demostrando que somos un país de puertas abiertas, con proyectos concretos y sostenibles en marcha», afirmó Orillac.
El ministro también agradeció al World Energy Council por elegir a Panamá como sede de este evento global, subrayando la importancia del diálogo, la cooperación y la innovación para construir un futuro energético más sostenible. Ángela Wilkinson, secretaria general del WEC, enfatizó que el propósito del encuentro es preparar a los líderes globales para implementar las transiciones energéticas necesarias para los próximos cien años.
«La energía es la base del progreso humano. Donde fluye la energía, crece la civilización», aseveró Wilkinson.
Según datos del World Energy Council, Panamá ha sido reconocida históricamente como una conexión estratégica entre el norte y el sur global, desempeñando un papel fundamental en las industrias de energía y sectores relacionados. La realización de la Semana Mundial de la Energía 2025 en Panamá reafirma su posición como un escenario vibrante para el diálogo internacional y la cooperación en materia energética, proyectando al país como un actor relevante en la transición hacia un futuro más limpio, competitivo y sostenible. El evento no solo celebró los logros del sector, sino que también impulsó la colaboración y la innovación necesarias para abordar los desafíos energéticos globales.