El presidente José Raúl Mulino ha logrado un importante hito económico para Panamá: el retorno de la multinacional Chiquita. Tras intensas negociaciones que culminaron con la firma de un Memorando de Entendimiento en Brasilia, la empresa bananera más grande del mundo retomará sus operaciones en Bocas del Toro, impulsando la economía local y generando miles de empleos.
Este acuerdo, concretado durante la visita oficial de Mulino a Brasil, pone fin a meses de incertidumbre para los habitantes de Bocas del Toro, una región que ha sufrido los embates del desempleo tras la salida de grandes empresas bananeras. El regreso de Chiquita representa una inyección de esperanza y un nuevo comienzo para la provincia.
5,000 empleos y una inversión millonaria:
La negociación, liderada directamente por el presidente Mulino, contempla un ambicioso plan de reactivación que se desarrollará en dos fases. En la primera etapa, se contratarán aproximadamente 3,000 trabajadores, y en la segunda fase, se sumarán 2,000 empleos adicionales. Chiquita ha comprometido una inversión inicial de 30 millones de balboas para reactivar la producción en 5,000 hectáreas de tierras bananeras y restablecer las operaciones de exportación. La meta es que la empresa esté operando a plena capacidad a más tardar en febrero de 2026.
Un modelo de operación sostenible y moderno:
Carlos López Flores, presidente de Chiquita, destacó que el retorno a Panamá se realizará bajo un modelo renovado de operación, más sostenible, moderno y eficiente. La empresa justificó su decisión de regresar al país por la confianza generada por el liderazgo del presidente Mulino, la seguridad jurídica que ofrece Panamá y el valioso recurso humano panameño.
Mesa técnica para garantizar el cumplimiento del acuerdo:
El Memorando de Entendimiento establece la creación de una mesa técnica integrada por representantes del Estado y de la empresa para dar seguimiento a los compromisos adquiridos y garantizar su cumplimiento efectivo. Los ministros Julio Moltó (Comercio e Industrias) y Roberto Linares (Desarrollo Agropecuario) firmaron el acuerdo en nombre del Gobierno Nacional, con el presidente Mulino como testigo principal de la ceremonia.
Mulino reafirma su compromiso con la inversión y el empleo:
El mandatario panameño expresó su satisfacción por el acuerdo alcanzado y reafirmó su compromiso con la generación de empleos y la atracción de inversiones. «Siempre trabajaré en favor de la inversión, la producción y la generación de empleos», declaró Mulino. «Lo que pasó, pasó, ahora debemos enfocarnos en ordenar el país en beneficio de las familias panameñas, en este caso, particularmente de los bocatoreños».
Impacto económico y confianza empresarial:
El retorno de Chiquita representa un impulso económico crucial para Bocas del Toro, dinamizando la economía local a través de servicios auxiliares, transporte y otras actividades comerciales relacionadas. Este acuerdo marca uno de los primeros éxitos significativos de la administración Mulino en materia de atracción de inversión extranjera, demostrando la capacidad del nuevo gobierno para generar confianza en el sector empresarial internacional. La decisión de Chiquita de regresar a Panamá después de su salida anterior envía una señal positiva sobre la estabilidad institucional y las oportunidades de negocio que ofrece el país bajo el nuevo liderazgo.