La Asociación de Arroceros de Chiriquí advierte que un aumento en el precio del arroz es «inminente» tras la reciente eliminación del control de precios por parte del gobierno. Gabriel Araúz, representante de los arroceros, destacó que la calidad del arroz que llega a las estanterías es responsabilidad de los molineros, quienes enfrentan desafíos en la producción y distribución del grano.
Araúz explicó que, desde 2019, la disponibilidad de arroz de primera calidad ha disminuido considerablemente, y en la actualidad, este tipo de arroz es casi inexistente. «Quien ejecuta el tema de que exista o no arroz en las estanterías de los supermercados es el molino, y en estos momentos no hay arroz de primera», enfatizó Araúz. Además, señaló que los productores de arroz podrían verse injustamente señalados como responsables de un posible aumento de precios, cuando en realidad el control de la calidad y el precio final del arroz recae en los molineros.
Arnulfo Morales, de la Federación de Productores de Arroz, también se pronunció al respecto, indicando que, con la eliminación del control de precios, el mercado del arroz se regulará por la libre oferta y demanda. Morales subrayó que es necesario un ajuste en los precios para asegurar la sostenibilidad de la producción y garantizar la disponibilidad del alimento en las góndolas.
El gobierno, por su parte, ha anunciado que dejará de compensar a los productores con 7.50 dólares por quintal de arroz húmedo y sucio a partir del 30 de abril de 2025, lo que podría impactar aún más en los costos de producción y, en consecuencia, en los precios al consumidor.
Con la eliminación del control de precios y las proyecciones de aumentos en el costo del arroz, tanto consumidores como productores deberán adaptarse a un mercado en transformación. La clave estará en cómo se gestionen los desafíos para mantener la accesibilidad del arroz, un alimento esencial en la dieta panameña.