El gobierno de Panamá ha presentado un proyecto de ley ante la Asamblea Nacional con el objetivo de reactivar el Programa Nacional de Biocombustibles. La iniciativa, impulsada por el ministro de la Presidencia, Juan Carlos Orillac, busca modificar la Ley 42 de 20 de abril de 2011 y el Código Fiscal, con el fin de promover la inversión en los sectores energético y agropecuario del país. El proyecto pretende impulsar la producción, comercialización y uso de biocombustibles, contribuyendo a la seguridad energética nacional, la diversificación de la matriz energética, la protección del medio ambiente y la generación de empleo tanto en zonas rurales como industriales.
Durante su presentación, el ministro Orillac destacó que la nueva ley representa un marco renovado para la política energética del Estado, buscando que el mercado de combustibles opere bajo parámetros de seguridad, eficiencia, sostenibilidad y competencia justa. «El objetivo es garantizar un suministro seguro, confiable y económico, tanto para la población como para el ambiente, e incentivar una sana competencia que beneficie al consumidor final», afirmó Orillac.
La introducción de biocombustibles en el mercado nacional se considera clave para fomentar la autosuficiencia energética, reducir la dependencia del petróleo, promover el saneamiento ambiental y dinamizar la economía agroindustrial, generando oportunidades de inversión tanto a nivel local como extranjero.
Entre las modificaciones propuestas a la Ley 42 de 2011, se incluyen cambios al artículo 9, que asigna a la Secretaría Nacional de Energía (SNE) la responsabilidad de expedir los permisos para la producción, almacenamiento, transporte, comercialización e introducción de biocombustibles en Zonas Libres de Combustibles. Se establecen dos tipos de permisos:
- Permiso de Planta de Producción de Bioetanol Anhidro: Otorgado a personas naturales o jurídicas que desarrollen facilidades para producir bioetanol a partir de materia prima nacional.
- Permiso de Usuario de Bioetanol Anhidro en Zonas Libres de Combustibles: Aplicable a quienes introduzcan bioetanol de procedencia extranjera, solo en caso de que la producción nacional no cubra la demanda interna durante la implementación del programa.
Ambos permisos estarán sujetos a requisitos, obligaciones y periodos de vigencia que serán definidos en la reglamentación correspondiente.
El proyecto de ley también establece el uso obligatorio de bioetanol anhidro como aditivo oxigenante en un 10% en las mezclas con gasolina en todo el territorio nacional. Además, se dispone que el bioetanol producido a partir de materia prima nacional deberá ser adquirido por los importadores-distribuidores de combustibles, siempre que cumpla con los estándares técnicos y de calidad establecidos.
La Ley 42 de 2011 ha sido modificada en varias ocasiones, incluyendo la Ley 21 de 2013, la Ley 47 de 2015 y la Ley 355 de 2023. Sin embargo, esta nueva propuesta busca reactivar plenamente el programa, incorporando ajustes técnicos, fiscales y regulatorios que permitan estimular la inversión privada, fortalecer el agro panameño y avanzar hacia un modelo energético más sostenible.
El ministro Orillac concluyó que esta iniciativa representa una oportunidad de desarrollo integral, donde el Estado, la empresa privada y el sector agropecuario pueden colaborar para construir un futuro energético más limpio, competitivo y con un impacto positivo en la economía nacional. La iniciativa busca modernizar la política energética panameña, impulsando la producción y el uso de biocombustibles para un futuro más sostenible y próspero.