IMPACTO PANAMÁ
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La selección italiana Sub 21 ha sorprendido al mundo del fútbol con un método de entrenamiento poco convencional implementado por su director técnico, Silvio Baldini. Este enfoque, que busca potenciar tanto el rendimiento físico como la fortaleza mental de los jóvenes futbolistas, ha generado gran expectación y debate.
En una de las últimas sesiones de práctica, los jugadores de la Azzurrina saltaron al campo con un parche negro en un ojo, al estilo pirata, despertando la curiosidad de todos los presentes. Baldini, quien asumió el cargo con total autonomía gracias al respaldo de Gianluigi Buffon y Gabriele Gravina, ya había utilizado este tipo de ejercicios en sus anteriores etapas en Catania, Palermo y Pescara.
¿En qué consiste este peculiar método? El objetivo principal es obligar a los jugadores a utilizar la mente y el cuerpo para interpretar el juego, yendo más allá de la simple percepción visual. “Quiero empujar a los chicos a mirar el campo no solo con los ojos, sino con la mente y con el cuerpo”, explicó Baldini durante un entrenamiento en Tirrenia.
La metodología, inspirada en prácticas utilizadas en deportes como el boxeo, se basa en sesiones cortas de hasta 20 minutos. Estas se dividen en tres fases: primero se cubre el ojo dominante, luego el contrario y, finalmente, se retira la venda. Según Baldini, esta dinámica simula una discapacidad visual grave, exigiendo a los futbolistas un nivel de concentración superior. Esto mejora la velocidad de ejecución, los reflejos y la capacidad de reaccionar ante situaciones adversas en el campo. El entrenador italiano sostiene que una concentración extrema puede reducir la fatiga y las limitaciones físicas durante los partidos.
Pero el enfoque de Baldini no se limita al parche en el ojo. Durante la concentración en Tirrena, el equipo aprovechó el entorno para realizar ejercicios de recuperación en agua salada, supervisados por bañeros. La combinación de trabajo en el mar y en la arena resultó beneficiosa, aunque esta práctica no podrá repetirse en invierno. Sin embargo, el DT ya ha ideado nuevas actividades para mantener la intensidad del entrenamiento.
Otro cambio significativo introducido por Baldini es la modificación de la convivencia en el hotel. Eliminó las habitaciones individuales y dispuso que los jugadores compartan habitación con compañeros del mismo puesto. El objetivo es fomentar el diálogo técnico y la cohesión del grupo. Los arqueros, por su parte, comparten una habitación triple. Además, Baldini promueve la comunicación interna, invitando a los futbolistas a explicar los ejercicios a los recién llegados.
El equipo también disfruta de momentos de distensión. Se organizan cenas grupales fuera del hotel, como la reciente visita a una granja cercana. Sin embargo, la disciplina se mantiene: los teléfonos celulares están prohibidos en el vestuario y deben permanecer apagados en las habitaciones o depositados en un canasto hasta que concluyen los entrenamientos. El cuerpo técnico, integrado por Barzagli, Nardini, Mattia Baldini, Labricciola, Pardini y Azzone, supervisa de cerca cada sesión.
Mirando hacia el futuro, Baldini planea llevar a todo el grupo a Carrara, su ciudad natal, para una jornada de búsqueda de setas, una actividad que forma parte de su enfoque integral. La selección italiana Sub 21 se prepara así para el partido del Europeo contra Ucrania el próximo 13 de octubre, correspondiente al Grupo E, que comparte con Polonia, Macedonia, Bosnia-Herzegovina, Armenia y Montenegro. Con este innovador método “pirata” y un enfoque holístico, Silvio Baldini busca llevar a su equipo a la victoria.
